jueves, 25 de enero de 2018

El discurso

El Discurso



Índice:

1. Presentación
2. El discurso
  2.2 Concepto
  2.3 Ejemplo
3. Discurso Oral
  3.1 Aspectos Fundamentales
4. Discurso Escrito
  4.1 Comunicación Verbalmente
5. Tipos de discursos
  5.1 Narrativos
  5.2 Expositivos
  5.3 Argumentativos
  5.4 Informativos
  5.5 Publicitarios
6. Características
  6.1 Agilidad
  6.2 Que exprese mensajes
  6.3 Corrección
  6.4 Flexibilidad
7. Elementos del Discurso
  7.1 Sustantivo o nombre
  7.2 Pronombre
  7.3 Articulo
  7.4 Adjetivos y verbos
  7.5 Participios
  7.6 Adverbios
  7.7 Preposiciones
  7.8 Conjunciones
  7.9 Interjecciones
8. Estructura
  8.1 Estructura de discurso
  8.2 Estructura interna de cada intervención
9. Lenguaje
  9.1 Técnicas
10. Aspectos formales
  10.1 Correcta y clara pronunciación
  10.2  Velocidad del discurso
  10.3 Pausas
 10.4 Modulación correcta de la voz
 10.5 Timbre de voz
 10.6 Muletillas
11. Análisis del discurso
12. Relación de la lógica con el discurso
  12.1 Lógica Natural
  12.2 Lógica Científica
13. Conceptos relacionados con el discurso
  13.1 Exordio
  13.2 Exposición
  13.3 Demostración
  13.4 Peroración
14. Técnica discursivas
15. Conclusión
16. Bibliografía
17. Anexos
 




Introducción

El siguiente trabajo que le presentaremos tiene como objetivo explicar y desglosar de forma detallada lo que es un discurso, puntualizando distintos conceptos y desarrollando en si  sus diferentes aspectos, entre los temas que se definirán a continuación se encuentran: El discurso oral y escrito, los tipos de discursos, los elementos,  características, estructura,  lenguaje, la relación del discurso con la lógica y los diferentes conceptos relacionados entre el mismo.


El Discurso

Un discurso es un mensaje que se pronuncia de manera pública. Se trata de una acción comunicativa cuya finalidad es exponer o transmitir algún tipo de información y, por lo general, convencer a los oyentes.

Para comprender el discurso es necesario tener en cuenta el contenido presentado (tema), el contexto donde es producido, y los elementos expresivos, que pueden tener diversas funciones referencial, si está dirigido hacia el contexto; persuasivo o connotativo.

La noción del discurso se basa en la lógica, pero incorpora los aportes de la lingüística, la antropología, la filosofía y la historia, entre otras disciplinas.
Ejemplo:
“El gobernador sedujo a los empresarios con un discurso muy convincente”“Ya basta de discursos: es el momento de actuar”“El discurso del gerente fue recibido con poco entusiasmo por los trabajadores en el marco de la convención”.






Para la lingüística, el discurso puede ser oral o escrito. Esto quiere decir que algunos textos también pueden considerarse como discursos.
                                                               

o  Discurso oral: 
               
Es el principal sistema de comunicación. Todos los demás se reducen a él. Se conoce que el lenguaje escrito no es sino la fijación mediante unos signos gráficos de lo que estamos hablando.
El discurso oral es el género más exigente de la comunicación: a la riqueza del contenido añade la elegancia verbal y el refuerzo de los elementos no verbales. La finalidad del orador es convencer de unas ideas a su auditorio, por lo que debe reunir ciertos requisitos, como los que veremos a continuación.
Aspectos fundamentales de un discurso oral:

·       Modulación: produce una correcta y clara pronunciación y contribuye a otorgar convicción a nuestro discurso.
·       Ritmo: es la velocidad con la emitimos las palabras. Los mensajes en un ritmo bajo quedan mayormente grabados en el auditorio, las bromas y frases irrelevantes requieren mayor velocidad.
·       Volumen: el mensaje es el que determina el volumen, alto o bajo.
Se caracteriza por la posibilidad de reforzar el significado mediante comportamientos extralingüísticos y por esto soporta toda una carga semántica. 
El discurso oral tiene lugar en contexto de situación, es decir en un conjunto de circunstancias de carácter social, emocional o cultural, donde se determina el acto lingüístico cuando se habla, no se necesita ser completamente explícito, pues gran parte de la significación esta fuera del texto. 
En el discurso oral, no solo se produce significación mediantes las palabras, sino también con el cambio de ritmo, mediantes las pausas, de tonos, velocidad, de gestos y movimientos. 


o  Discurso escrito:
Todo texto producido por un emisor en un proceso de comunicación donde se use el código lingüístico oral o escrito es considerado un discurso escrito. El texto constituye la unidad de análisis de los estudios del discurso.

Un hablante emplea gran parte de su tiempo comunicándose verbalmente en el siguiente orden: 
·       Escuchando
·       Hablando
·       Leyendo
·       Escribiendo

 La capacidad de comunicarse por escrito es la menos usada, porque el sujeto no la práctica con frecuencia, por esta razón el arte de escribir es el que más se dificulta.
La habilidad de producir discursos no llega a dominar todos los hablantes de una lengua. Mientras que el habla se adquiere por el simple hecho de nacer y convivir en una comunidad lingüística. La habilidad de escribir se adquiere a partir de una instrucción especial.

o  Tipos de Discursos:
·       Discurso narrativo: este discurso expone una serie de hechos a través de una trama y argumento. El discurso narrativo si bien predomina en textos literarios, también se los puede encontrar por ejemplo, en los noticieros. Su estructura contiene un inicio, nudo y desenlace. A lo largo de este, se presenta una intriga que es la que mantiene al receptor atento ya que no se la resuelve hasta el final.

·       Discurso expositivo: los discursos de este tipo buscan explicar de manera concisa, clara y objetiva una temática en particular. La estructura de estos discursos está compuesta por una introducción, en la que se aclara el tema que será tratado, la explicación y, por último, un resumen o epílogo donde se repasen las principales nociones tratadas.

·       Discurso argumentativo: este discurso tiene la función de convencer al receptor sobre una determinada cuestión por medio de su entendimiento lógico. Para esto, los argumentos a los que acuda el emisor deben ser sustentados de manera racional, debe sonar convincente, no se debe avasallar al receptor, sino que este sienta que se transmite una verdad universal. La estructura de este tipo de discursos se compone de una tesis o idea a demostrar, que se plantea al principio, luego se exponen los argumentos y finalmente la conclusión, en la que se reafirma la idea inicial pero con las justificaciones racionales ya expuestas.

·       Discurso informativo: este tipo de discursos, también conocidos bajo el nombre de referencial, transmite datos con precisión y de manera concreta provenientes de la realidad. El emisor expone su discurso de manera objetiva y directa, tratando de dejar a un lado sus opiniones personales. El discurso informativo se caracteriza por el uso de la tercera persona, tiempo verbal indicativo, oraciones impersonales y en el que muchas veces se presentan conceptos técnicos.

·       Discurso publicitario: este discurso tiene como función vender algún servicio o producto. Para alcanzar dichos objetivos, debe resultar atractivo a sus receptores, llamar su atención, ser breve, dejar de lado toda aquella información sobre el producto que puedan perjudicar las ventas. También debe ser variado y carente de monotonía.


o  Características:

Un buen discurso debe de tener las siguientes características:
·       Agilidad: frases cortas, que son más fáciles de pronunciar y entonar por parte del orador, y sobre todo, de recordar por el público. Hay que tener cuidado, sin embargo, para no caer en lenguaje telegráfico.

·       Que exprese mensajes: veraces, concretos, relevantes y sin ambigüedades. En otro foro más cínico quizá habría omitido la necesidad de veracidad, pero en este creo que es importante tenerla en cuenta.

·       Corrección: En dos sentidos. Por un lado, corrección “técnica”, es decir, semántica, morfológica y sintácticamente. Por otro, el discurso debe pronunciarse siempre con educación y respeto hacia todos los interlocutores, jurado y público.

·       Flexibilidad: El discurso debe estar preparado de antemano, pero a la hora de exponerlo debe tenerse un alto grado de flexibilidad con respecto al texto.
Para asegurar un equilibrio entre la preparación y la espontaneidad, el orador puede preparar un archivo o fichero con bloques de argumentos, que le servirán como complemento a sus exposiciones. Cada bloque tendrá un título, y contendrá todas las evidencias (ejemplos, citas, datos, etc.) que respalden el mismo argumento genérico. La organización de los argumentos es fundamental a la hora de emplearlos.


o  Elementos del Discurso:

ü Sustantivo o Nombre:
Así que los hombres hubieron distinguido los sonidos trataron de inventar palabras con que pudiesen designar los diferentes objetos que se ofrecían a sus sentidos, y, como cada uno de estos objetos es un ser animado o inanimado, pero siempre una sustancia, las primeras palabras en que se convino se llamaron sustantivos, esto es, nombres de sustancia. Los sustantivos debieron necesariamente ser precedidos, como se verá más adelante, de la interjección y la exclamación, gritos enérgicos y rápidos mandados por la naturaleza misma.

ü Pronombre:
En seguida, para evitar la repetición de las mismas palabras, cuando se presentaban en el discurso los mismos objetos, fue necesario, pues, crear otras que pudiesen expresar las cosas que se querían sobreentender: de donde tuvo origen el pronombre.
ü Artículo:
Nuestros primeros gramáticos, habiendo dividido todas las cosas animadas é inanimadas en dos géneros, se vieron obligados a convenir en dos palabras para señalar esta división. Estas dos palabras fueron el para el masculino singular y los para el plural; la para el femenino singular y las para el plural. Dieron a estas palabras el nombre de artículos.

ü Adjetivos y Verbos:
Pero hablando de las cosas es necesario decir lo que son, lo que ejecutan, calificándolas de una manera cualquiera, explicarlas. Fue preciso, pues, por esta razón buscar otras palabras, ya para designar los atributos y las calidades de las sustancias, ya para marcar su influencia y sus diversas operaciones: este fue el origen de los adjetivos y los verbos. Se tomó la palabra adjetivo del latín adjetivos, que añade, porque son como unas añadiduras de los nombres, o mejor dicho, les añaden atributos o cualidades; y el verbo de verbum, palabra, esto es, la palabra por excelencia que expresa la existencia, la acción y el estado de los seres. Es la parte que en el discurso desempeña el papel principal.

ü Participio:
En las diferentes locuciones se encontraron palabras que, sin ser verbos ni adjetivos, tenían una propiedad que se derivaba, que participaba de la naturaleza de uno y otro, y estas palabras recibieron por este motivo el nombre de participios. Entran más particularmente en la clase de los atributos, ya tan numerosa.

ü Adverbios:
De ad, que significa adición y de verbum, palabra. Considerando las diversas cualidades y acciones relativas a los adjetivos y a los verbos, se vio que eran susceptibles de una multitud de modificaciones y adiciones calificativas. Fue, pues, necesario inventar aun palabras para designar estas modificaciones y se les llamó adverbios; porque se añaden a los verbos con el fin de extender, de restringir o de cambiar su significación.
ü Preposiciones:
A estas, a las palabras de que acabamos de hablar, sucedieron nuevas expresiones para indicar las relaciones que las palabras tienen entre sí, y fijar la idea de la una por la de la otra. Estas nuevas expresiones se llamaron preposiciones, de prae, antes y de positio, posición, porque preceden al segundo de los términos puestos en relación.
ü Conjunciones:
De cum, con y de jungere, unir. Teniendo las cosas relaciones remotas, hubiera sido imposible reunirlas en la misma frase sin el auxilio de ciertas palabras, que, para este efecto, se llamaron conjunciones, esto es, que sirven para unir, para trabar o enlazarlas frases o los miembros de una misma clase.
ü Interjecciones:
Finalmente, después de haber proporcionado con toda seguridad los medios de poder designar todo lo que existía en la naturaleza, la especie, el número, los atributos, la influencia, la existencia, las relaciones y las diferentes modificaciones de las cosas, se inventaron otras para pintar los movimientos súbitos del alma: estas fueron las interjecciones que son en mayor o menor número, según el genio de las lenguas. Acaso la interjección, que los gramáticos colocan en último lugar entre las partes del discurso, fuese el primer elemento del lenguaje.
De modo que, como se ve, las diez partes de nuestro discurso tienen su origen en la naturaleza y no se puedo pronunciar una palabra que no entre en uno u otro de estos elementos.
o  Estructura:
Realizar exposiciones ordenadas ayuda al jurado a seguir la línea de pensamiento del equipo. Podemos distinguir entre:
  • Estructura del discurso: orden lógico de las ideas a exponer. El criterio de ordenación puede ser muy diverso en función de la estrategia adoptada, pero el conjunto debe presentar coherencia (exponiendo, por ejemplo, causas antes que efectos). El objetivo es facilitar la comprensión por parte de aquellos que lo escuchan y tienen que valorarlo.
  • Estructura interna de cada intervención: introducción, cuerpo y conclusión. Se trata de una estructura base para todas las intervenciones, sea cual sea el turno en el que se encuentre el orador.
o  Lenguaje del Discurso:
Un buen orador utiliza un lenguaje correcto y un vocabulario amplio para dar a sus ideas una forma elegante y efectiva.
Algunos de los aspectos que debe cuidar son:
·        Corrección sintáctica y morfológica en la composición de las oraciones.
·        Corrección semántica (utilización de la palabra precisa para la idea que quiere expresar)
·        Riqueza de vocabulario (huyendo de palabras pretenciosas). Se trata de disponer de palabras adecuadas en todo momento.
·        Intentar evitar el uso de palabras excesivamente técnicas, vocablos extranjeros… que puedan no ser comprendidos por el público.

Además de una exposición correcta, un orador que pretenda convencer debe asegurarse de que es escuchado. Un buen discurso debe ser dinámico, ameno (divertido cuando la ocasión lo permita) y atrayente, que despierte y mantenga el interés de la audiencia y la involucre en la causa que se está defendiendo.
Para ello puede servirse de distintas técnicas:
a)     Utilización de imágenes, figuras literarias y recursos estilísticos. Adornan el discurso y lo hacen más gráfico. Algunos de ellos (metáforas, símiles, refranes, etc.) forman parte del lenguaje cotidiano, de modo que en ocasiones son utilizados sin tener consciencia de ello.
b)     Utilización del humor; para escapar de situaciones de tensión, romper el ritmo en un momento determinado, ganarse el favor de la audiencia, etc.

o  Aspectos Formales del Discurso:
Cada persona tiene una manera diferente de hablar, y es importante que cada orador imprima su sello personal en sus intervenciones. Sin embargo, hay requisitos que deben cumplirse en todo caso:
·       Correcta y clara pronunciación: no se puede pedir a la audiencia un doble esfuerzo: por un lado comprender las ideas que subyacen en el discurso y por otro, entender las palabras que salen de boca del orador.

·       Velocidad del discurso: tiene relación directa con el apartado anterior, ya que si un orador habla demasiado deprisa, no será capaz de terminar las palabras y oraciones, y su pronunciación será deficiente.

·       Pausas: todo orador necesita introducir en su exposición pequeñas pausas para respirar y regular su entonación.

·       Modulación correcta de la voz: se trata de dar la entonación y el volumen apropiados para cada parte del discurso, con el fin de dar énfasis a los datos importantes, recuperar la atención de la audiencia mediante cambios bruscos de volumen (aumentándolo o bajándolo), etc. Cada orador debe trabajar para ser capaz de aumentar el volumen sin resultar estridente y bajarlo manteniendo la firmeza.

·       Timbre de voz: cada orador debe conocer su timbre de voz, y realizar esfuerzos por corregir posibles deficiencias (voz excesivamente grave o aguda, nasal o gutural).

·       Evitar las muletillas: hay que prestar atención en cómo se empiezan las frases, eliminando los “humm”, “eeh”, “bueno”, etc. Durante la exposición debe evitarse la repetición de expresiones como “es decir”, “por supuesto”, “o sea”. Las muletillas tienen un efecto cacofónico y el público se distrae, acabando por estar más pendiente de contar las veces que un orador pronuncia una palabra determinada que de escuchar el contenido de sus mensajes.
o  Análisis del discurso:


Es una disciplina transversal de las ciencias humanas y sociales que estudia sistemáticamente el discurso escrito y hablado como una forma del uso de la lengua, como hecho de comunicación y de interacción, en sus contextos cognitivos, sociales, políticos, históricos y culturales.



o 
Relación de la Lógica con el Discurso:
Se define la lógica como el arte directiva de la razón, por la que esta procede ordenamente, con facilidad y sin error. Es pues, un saber práctico (arte), y sirve como instrumento para las demás ciencias.
Hay una lógica natural, espontanea, de la razón humana y una lógica científica.

La lógica descubre normas y leyes que obligan a la razón, porque esta se ordena al conocimiento de la verdad. Las normas éticas señalan el bien, las lógicas dirigen el discurso a la verdad.

o 
Conceptos relacionados con el discurso:

ü  Exordio: es la presentación del asunto, es el fragmento que da apertura. Este debe dejar claro el tema del discurso para que así los oyentes puedan entender que tratara el resto de la presentación.
ü  Exposición: es la presentación de antecedentes sobre el tema. La función de este es sentar las bases para los argumentos que vienen en la siguiente sección.
ü Demostración: la argumentación es cuando el orador empieza a exponer pruebas, a dar argumentos respecto a todo lo expuesto con anterioridad, un rasgo que nos ayuda a identificarlo es que el orador comienza a exponer su verdad al respecto.
ü  Peroración: es el cierre del discurso. Para este el orador debe ser cuidadoso y hacer una ratificación de su argumento.




o  Preparación del Discurso:

ü  Mejorar la comunicación verbal.
ü  Selección de un tema.
ü  Acopio de información.
ü  Selección de materiales.
ü  Ordenamiento de materiales.
ü  Construcción del mensaje (guión).
ü  Conclusión.
ü  Habilidades de un comunicador.
ü  Conocimientos técnicos de un comunicador.





 



                                        


 









Conclusión
Como resultado de la investigación es posible concluir que existe una relación entre los tipos de discursos ya sean narrativos, expositivos, argumentativos, informativos y publicitarios. Esto es debido a dos factores principales; el primero es informar o transmitir algún tipo de información de manera que los receptores capten y entiendan todo de principio a fin, El segundo factor es que cada uno de los tipos de discursos utilizan un método diferente para emitir su información, con el mismo propósito y es que el oyente se informe con todos los detalles.
Por otro lado el sistema que se utiliza puede ser diferente aun así estén entre lazados tanto como en el oral como también en el escrito.
En el oral el hablante puede convencer y abarcar mayor cantidad de persona de cualquier tipo de índole o clase y esto lo hace el más exigente, ya que este debe de tener un ritmo, orden y volumen en el uso de las palabras aplicadas para diferentes  tipos de personas.
Por lo cual el escrito exige el análisis de las personas al cual será destinado el discurso, evaluar la capacidad de entender los diferentes tipos de personas, niveles que cada quien posee al momento de aplicar las palabras que serán utilizadas en el mismo.
Ya con esto concluimos que el discurso de cualquier manera o forma que sea empleado, tendrá  la misma finalidad de informal con claridad y precisión.











         



    





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